Lo prometido es deuda, Gin, tal como te dije le sigo la pista;

Sigo al Juez Ferrin Calamita.

Antes un poco de historia, para que veas como es el juez en cuestión.

Dos días pasaron en los calabozos de Chiclana de la Frontera dos jóvenes hace ahora veinte veranos. Leían tumbadas en la playa de la Barrosa, una desnuda y la otra en topless, cuando un tipo en chándal les recriminó su actitud y les ordenó que se vistieran. "Y usted, ¿quién es?". "Yo soy el señor juez", contestó el del chándal. "Y yo, la Martirio", replicó una de las sevillanas, sin saber que minutos después aparecería la policía local primero, y luego la Guardia Civil, para hacer efectiva la orden del magistrado: las llevaron a rastras hasta los calabozos.

A este mismo juez se le ha abierto expediente disciplinario grave por equiparar a homosexuales con toxicómanos, pederastas, prostitutas y miembros de sectas satánicas, y a raíz de tal arquitectura mental denegar la custodia de dos hijas a una madre.
El magistrado lanzo también críticas a otras legislaciones aprobadas durante esta legislatura, como la ley integral contra la Violencia de Género y el "sinnúmero de falsas denuncias de mujeres que se está produciendo".
Otro caso que investiga la comisión disciplinaria del Poder Judicial es el de un médico, Juan Mario Pérez Abad, que se separó recientemente y que refiere distintas quejas.
Pérez Abad solicita que se compruebe la capacidad del juez Ferrín, para el ejercicio de su trabajo, "para evitar males mayores en su contra".
Afirma que durante las dos sesiones del juicio a las que asistió apreció que "presentaba un temblor muy característico denominado extrapiramidalismo que se presenta como efecto secundario en el tratamiento de la psicosis".

Dicen en el CGPJ que los expedientes que se van acumulando sobre el juez podrían llevar a su incapacidad para ejercer el cargo.
Ferrín Calamita lleva tiempo demostrando su incapacidad para separar sus convicciones personales y religiosas del ejercicio de su autoridad.
La cúpula judicial considera plantearse una posible incapacitación del magistrado.
Esta de baja psiquiátrica, y en tratamiento desde hace años y pertenece a la conservadora Asociación Profesional de la Magistratura (APM).
El polémico juez de Murcia Ferrin Calamita descalifico duramente en dos resoluciones judiciales a Francisco Ortega, abogado de la mujer a la que le quitó la custodia por ser lesbiana.
Todo a partir de que el letrado haya pedido la recusación del juez que ha sido expedientado por el Consejo General del Poder Judicial.
En esos autos, El juez afirma que es totalmente imparcial y que para el, este caso es una mas de los miles y miles que ha tenido en sus veinte años de ejercicio.
Concluye su providencia retando a la mujer a que designe otro abogado si la Audiencia Provincial rechaza la recusación.

Llueve sobre mojado.

Vamos que o se queda de baja eternamente, que como es funcionario, puede hacerlo, o le retiran, que lo dudo por las influencias que tiene..
Por suerte, ni la sentencia es irreversible ni este juez es la Judicatura.